Nuestra epidemia de soledad y aislamiento

Se trata de una Recomendación del Cirujano General, un recurso mediante el que esta figura suele llamar la atención del pueblo estadounidense sobre un problema urgente de salud pública y se ofrecen recomendaciones sobre cómo abordarlo. En este caso, la problemática a afrontar es la soledad no deseada.

Conscientes de que este problema requiere de una respuesta comunitaria, el Cirujano General de Estados Unidos, el principal portavoz en materia de salud pública en el gobierno federal cuyo equivalente en España podría ser la Dirección General de Salud Pública, ha publicado la Recomendación del Cirujano General Nuestra epidemia de soledad y aislamientoEste enlace abre en pestaña nueva, en la que desarrolla el marco para una Estrategia Nacional para Promover la Conexión Social. Aparte de reconocer la importancia de promover la conexión social, supone un compromiso de invertir y tomar medidas en esta dirección.

La soledad no deseada y la desconexión social afectan la salud individual, comunitaria y al bienestar general. Es un factor crítico que afecta a la salud, la longevidad, la seguridad, la prosperidad y el bienestar de las personas. De acuerdo con los descubrimientos del último estudio publicado por el Observatorio SoledadES, la soledad no deseada supone importantes costes sanitarios, provoca considerables pérdidas de productividad e impacta en la calidad de vida de las personas.

El informe presenta evidencia contundente que demuestra la relación entre la conexión social y diversos factores de salud. Se discute el impacto de la soledad y el aislamiento en la salud mental y física, incluyendo la depresión, la ansiedad, la inflamación crónica, enfermedades cardiovasculares y la duración de vida. El informe también investiga los factores que aumentan el riesgo de la soledad y el aislamiento social, incluyendo el envejecimiento, la ubicación geográfica, la pobreza, los prejuicios culturales y la discriminación social.

También describe los diferentes mecanismos a través de los cuales la conexión social puede influir en la salud y el bienestar, incluyendo el impacto de la conexión en el estrés, el comportamiento de salud y la influencia social. Además, se discuten las posibles intervenciones que pueden ayudar a las personas a fortalecer sus conexiones sociales, como el voluntariado, la participación en grupos comunitarios y la utilización de tecnologías virtuales para la conexión social.

Tal y como se explica en el documento, son muchos los beneficios de tener una Estrategia Nacional de estas características. Por un lado, se promueve la salud y el bienestar individual a través de la salud física y mental, teniendo resultados educativos y económicos positivos. Además, se fortalece la seguridad y prosperidad de la comunidad, se incrementa la capacidad de adaptación de cara a los futuros desafíos que deban afrontarse (como peligros naturales, pandemias o amenazas a la seguridad) y se contribuye al fomento de una ciudadanía más comprometida.